El 1 de enero de 2020, se produjo uno de los hitos más importantes de la instalación de la nueva institucionalidad científico-tecnológica de nuestro país, que lidera el Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación. CONICYT, la institución que por más de 52 años estuvo a cargo de la promoción y fomento de la ciencia y la tecnología en Chile, se transforma en la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo, ANID, entidad con una visión que reinterpreta y enriquece la labor desarrollada por su antecesora, con una estructura más liviana, eficiente y al servicio de la comunidad. Estructura a la que además se suma la Iniciativa Científica Milenio y la gerencia de Capacidades Tecnológicas de la Corporación de Fomento de la Producción.
Esta transformación, busca dotar al Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación de la capacidad de apoyar con recursos el desarrollo de la ciencia y la innovación en Chile con objetivos de largo plazo, siguiendo las directrices de su Estrategia Nacional de CTCI y su Política Nacional.
La Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo se ha planteado grandes desafíos, resguardando el legado de CONICYT, pero sintonizando con las actuales necesidades del país. Ello, a través de la implementación de cinco subdirecciones: formación de Capital Humano Avanzado; Investigación Asociativa; Investigación Individual; visibilización del Conocimiento y generación de Redes Estratégicas; e Investigación Aplicada. Cada uno será impulsado por una Dirección, encargada de reorientar la experiencia y capacidades de los distintos equipos que integraban la anterior estructura y los nuevos que se suman.